El cheesecake no se inventó en Nueva York. Pero los panaderos inmigrantes de la ciudad modificaron y promovieron una versión que se hizo famosa en todo el mundo.
Durante siglos, la gente horneaba estos postres en toda Europa usando sabroso queso de granjero, dijo Joan Nathan, experta en cocina judía estadounidense.
El cheesecake dulce de NY
En Estados Unidos, “todo era más dulce”, asegura Joan Nathan. Aún así, muchas de las recetas iniciales usaban requesón como base.
Eso fue hasta que un agricultor del norte del estado de Nueva York se convirtió en uno de los primeros inventores conocidos del queso crema en 1872, dijo Nathan. En la década de 1920, las empresas más grandes promocionaban el nuevo queso con sus propias marcas y agregaban fresas al postre.
Un restaurante urbano emprendedor llamado Reuben’s creó un cheesecake con una base de queso crema. En 1935, su panadero fue cazado furtivamente por Lindy’s, un restaurante rival, cuenta la Sra. Nathan en su libro, “La cocina judía en Estados Unidos”.
El nuevo pastel, con su base de queso crema, se convirtió en un alimento básico de los delicatessen y los comensales judíos de la ciudad, y su fama se extendió por todo el país.
El cheesecake transformó la vida de los neoyorkinos
Cuando Harry Rosen estaba transformando su restaurante Enduro de Brooklyn en un restaurante llamado Junior’s en 1950, dijo que “cualquier gran restaurante de Nueva York debe tener un gran cheesecake”, recordó su nieto Alan Rosen.
Entonces, el anciano Sr. Rosen y su chef viajaron a restaurantes de toda la ciudad, probando y experimentando, extrayendo elementos de cada cheesecake para crear lo que desde entonces se ha convertido en “el cheesecake por excelencia de Nueva York”, dijo Ed Levine, un crítico de comida.
Nada como Junior’s
“Hay otros cheesecake que tienen reputación en Nueva York, seguro, pero no como el de Junior”, asegura Levine.
Tal vez la competencia sea simplemente más intensa, ya que los chefs continúan improvisando la receta básica de queso crema, huevos, azúcar y crema espesa. “Ahora hay cheesecakes posmodernos”, dijo Levine.
Cuando Eleven Madison Park inició su menú de Nueva York, el cheesecake “fue una de las primeras cosas que añadimos”, dijo el chef Daniel Humm.
Pero no necesitas viajar tan lejos para probar un delicioso cheesecake o para encontrar lugares para desayunar que valgan la pena; baja tu app delivery favorita y comienza a hacer tus pedidos. Tu restaurante favorito puede ofrecerte una variedad de platillos y muchas cosas buenas para ti. ¡Incluso hay increíbles sorpresas!